Los conejos y cobayas como cualquier otra especie necesitan un entorno que les aporte lo necesario para manifestar sus conductas instintivas y naturales con total libertad.

Cuando hablamos de las conductas naturales nos referimos a correr, saltar, roer, rasguñar y escarbar, ya que éstas son propias de ellos y son maneras de expresión que les permite interactuar con el medio y desarrollarse de una manera sana tanto física como mentalmente.

Estos animales domésticos han sido el resultado del cruce de varias sub especies y también de un largo proceso de selección genética, que con el pasar de los años han modificado varios de su hábitos y características, adaptándose a diferentes medios y entornos, desde bosques y sistemas de producción hasta casas y apartamentos.

La enfermedades dentales son un problema muy común en los conejos, cobayas y roedores domésticos. Una de las principales causas es la mala alimentación o la falta de fibra. Los dientes de ellos son muy diferentes a los de perros y gatos debido a que crecen a lo largo de toda su vida y necesitan ser desgastados continuamente. Si no obtienen suficiente desgaste, comienzan a crecer excesivamente en su boca, las raíces se vuelven hacia atrás en la mandíbula y el cráneo.

Por eso aconsejamos complementar ese desgaste con diferentes juguetes que ayudan a cumplir este objetivo además de entretenerlos y evitar que puedan roer objetos peligrosos como cables o diferentes elementos de nuestro hogar.