El corte de las uñas se hace con una tijeras afiladas o con un cortador de uñas especial. Sujeta la pata de tu peludito y corta la uña a unas fracciones de centímetro de la raíz (una parte sensible de la uña que se ve como una linea roja por su interior). Ten mucho cuidado de no cortar esa parte. Si accidentalmente llegas a cortar este sensible nervio y conducto sanguíneo -como la raíz de un diente- el reaccionara violentamente. Lo que debes hacer es desinfectar la herida inmediatamente, pero si continua sangrando llévalo de inmediato a tu veterinario de confianza. 

Las uñas delanteras normalmente crecen más rápidamente que las traseras, por lo tanto estas tendrán que ser cortadas con mayor frecuencia. Es así porque en estado silvestre, en plena naturaleza, las uñas de las patas delanteras se desgastan más rápidamente que las de las patas traseras debido a las excavaciones que ellos acostumbran hacer.

En todo caso siempre te recomendamos que este procedimiento sea realizado por un procesional ¡Escríbenos para una sesión de belleza!

Los baños pueden llegar a ser muy traumáticos o estresantes para nuestros peluditos, ¡así que trata de evitarlo! Puedes usar pañitos húmedos para bebe (sin olor) para limpiarlos y nunca uses shampoo para humanos.

Recuerda realizar una limpieza de la jaula por lo menos 1 vez a la semana, puedes usar una mezcla de agua y vinagre para desinfectar, deja secar bien antes de reemplazar cualquier ropa de cama, juguetes, o platos, para impedir el crecimiento de bacterias o de amoníaco que puede dañar a tu peludito.